El tan esperado choque de sistemas 4-3-3 de ambos equipos, que ilusamente pensaba que podríamos ver ayer, no tardó ni 10 minutos en diluirse hacia un 4-5-1 del conjunto inglés que en gran parte del primer tiempo se transformó hasta en un 7-2-1. Con respecto a este tema no quiero entrar en un debate estéril pero sí matizar que para mi, que venga el Getafe en liga y saque un 1-1 donde incluso si llega a ganar no hubiera pasado nada, fruto de un excelente y meritorio trabajo para un equipo de su presupuesto, hay que valorarlo. Ahora bién que propuestas como la de anoche la hagan equipos como el Manchester el año pasado, el Madrid o el mismísimo Chelsea, con el nivel que se les presupone a tenor de sus presupuestos y los jugadores que tienen, me parecen el mayor atentado al fútbol y al espectador.
Eso sí, cada uno hace la propuesta futbolística que más le interesa o mejor dicho la que puede. Lo que sí que me parece indignante es el hecho de que en estas circunstancias parece, por lo visto en varias ocasiones, que el árbitro siempre se alía con el que menos propone, el infractor, puesto que anoche para sorpresa de todos ambos equipos acabaron con 2 tarjetas amarillas.
Hoy hay muchos que comentan que el Chelsea hizo su partido, que tiene mucha fortaleza, etc... pero me gustaría ver lo que hubieran comentado si el partido llega a acabar 1-0 ó 2-0 que hubiera sido lo más justo y normal. Sin ir más lejos me sorprendió mucho que gente de fútbol como Michel, nuevo entrenador del Getafe, dijera cosas como que lo del Chelsea ayer fue lo del Valencia el sábado llevado a la máxima expresión. Pues Sr. Michel, menudas flores le ha mandado usted a los valencianistas porque no se qué partido vió usted pero el Valencia jugó un gran partido de fútbol, con buena disposición en el campo, muy buena presión provocando innumerables y poco habituales pérdidas en los culés, con fútbol de calidad y sobretodo con goles, en definitiva, mucha de esas cosas que te dignifican y a las que el Chelsea renunció anoche.
Por último, decir que la eliminatoria queda abierta y se resolverá en Londres, donde la mala suerte para los culés por la lesión de Márquez y la amarilla vista por Puyol, obligarán a Guardiola a buscar un acompañante para Piqué en el centro de la defensa, probablemente Cáceres.